Ahí donde le ves, querida Isabel, fue en su juventud todo un "pincel"; gran bailarín, buen manejo de las artes del dibujo y la pintura, y un "seductor" preciso. De todo ello le queda la mirada y esa sonrisilla que a todos nos encanta.
Qué retrato tan franco, cuánta certeza en él. Y ese reflejo al fondo, y esa foto en la penumbra...retratando otro tiempo, un tiempo con la superficie más blanda, más huidiza pero que está ahí, con nosotros.
Pues si, querido amigo Xuan, hace ya algún tiempo que creo haber dado la vuelta a ese largo calcetín de la vida, ese que se ciñe a las cosas que suceden entre padres e hijos, y ahora solo siento por ellos amor, orgullo y grandes dosis de ternura.
¡Guapos! Y con esa miradita de humor, tienes a quien salir que decimos aquí.
ResponderEliminarAbrazos
Ahí donde le ves, querida Isabel, fue en su juventud todo un "pincel"; gran bailarín, buen manejo de las artes del dibujo y la pintura, y un "seductor" preciso. De todo ello le queda la mirada y esa sonrisilla que a todos nos encanta.
ResponderEliminarGracias y un beso.
Qué retrato tan franco, cuánta certeza en él. Y ese reflejo al fondo, y esa foto en la penumbra...retratando otro tiempo, un tiempo con la superficie más blanda, más huidiza pero que está ahí, con nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo, Josep. Qué orgulloso tienes que estar.
Pues si, querido amigo Xuan, hace ya algún tiempo que creo haber dado la vuelta a ese largo calcetín de la vida, ese que se ciñe a las cosas que suceden entre padres e hijos, y ahora solo siento por ellos amor, orgullo y grandes dosis de ternura.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.